También conocido como arrendamiento con opción de recompra, es una operación financiera que consiste en que una empresa vende un activo, normalmente inmobiliario o maquinaria, a otra compañía o inversionista y posteriormente lo vuelve a alquilar para seguir utilizándolo.
De esta forma, la empresa que originalmente era propietaria del activo obtiene liquidez mediante la venta, pero puede seguir usando el activo pagando un alquiler. El comprador obtiene una rentabilidad por el alquiler del activo.
¿Cómo funciona el Leaseback en Chile?
En Chile, el leaseback se emplea frecuentemente en sectores como la construcción y la logística. Las empresas recurren a esta operación principalmente para:
– Obtener liquidez y mejorar ratios financieros: Mediante la venta de activos no estratégicos como terrenos, edificios, maquinaria, etc. la empresa genera flujos de caja de forma rápida.
– Externalizar la gestión de activos: La empresa puede concentrarse en su negocio principal sin tener que gestionar activos que no son clave en su operación.
– Reducir pasivos y costes financieros: Si el activo vendido estaba sujeto a una deuda, esta se cancela, mejorando la estructura de capital.
Los plazos del leaseback en Chile suelen oscilar entre 5 y 20 años, con opción de renovar el contrato de arrendamiento o ejercer una opción de recompra del activo.
¿Qué diferencias existen entre el leasing y el leaseback?
Aunque tanto el leasing como el leaseback son formas de financiamiento basadas en el arrendamiento, existen diferencias importantes:
– En el leasing la arrendadora adquiere un activo nuevo a solicitud del arrendatario. En el leaseback el activo ya es propiedad del arrendatario.
– El leaseback genera liquidez al arrendatario por la venta del activo, cosa que no ocurre en el leasing.
– En el leasing la propiedad del activo se transfiere al arrendatario al finalizar el contrato. En el leaseback esto solo ocurre si se ejerce la opción de compra.
– El leaseback permite vender activos obsoletos o no estratégicos y generar liquidez manteniendo su uso. El leasing se utiliza para adquirir activos productivos nuevos.
El leaseback es una alternativa para que empresas con activos inmobiliarios o equipos que no son estratégicos puedan obtener liquidez y seguir empleándolos vía arrendamiento. En Chile es una opción atractiva en sectores como la construcción y transporte.